La caries del biberón es también llamada rampante debido a la rapidez y gran destrucción del diente, ya que las bacterias se alimentan de los restos de azucares que quedan en los mismos.
Se produce debido al impacto directo sobre los dientes de líquidos que contienen azúcares como la leche materna, zumos y en general cualquier bebida con alto contenido en azúcares.
Los bebés acostumbrados a dormirse con un biberón sin después mantener un cepillado correcto son los más susceptibles a padecer esta enfermedad.
Los síntomas son clínicos, apareciendo primero una manchita blanca, que posteriormente se oscurece; y seguidamente comienza la destrucción parcial o total del diente en cuestión.
Como siempre hay que aplicar la PREVENCION: correcta higiene de nuestros más pequeños.